Blogia
Cuba Latino

Laura Inclán: la certeza de saber

Laura Inclán: la certeza de saber

Laura Inclán Narbona habla de música con plena autoridad. Siempre que escucho sus programas en CMBF Radio Musical Nacional o en Habana Radio, percibo confianza ante una conocedora de cuanto expresa.

En cada comentario vislumbro esa entonación y dicción características de ella, que imprimen un aire de indudable certeza. Al referirse a la música sinfónica, evidencia la dignidad de un magisterio. Su voz clara trasmite una pedagogía amena.

Esta radialista cubana que tiene como divisa la excelencia no llegó a este punto cimero desde la improvisación. Tras su facultad natural para comunicar sus amplios conocimientos musicales subyacen años de estudio y una ejercitación consecuente del quehacer musical.

Laura nació en Santa Clara el 22 de febrero de 1950, y desde joven recorrió el camino de una formación académica; según me confesó, siente el orgullo de haber sido alumna de piano de la Maestra Margot Rojas. Cursó estudios en el Conservatorio Amadeo Roldán, en La Habana, y después durante más de un curso en la Escuela Nacional de Arte.

En su vida laboral se mantuvo durante dos años en la Orquesta Sinfónica Nacional como pianista, aproximadamente en 1970, sustituyendo nada menos que a la Maestra Pura Ortiz, quien a la sazón presentaba problemas de salud. Posteriormente trabajó en el grupo Ocuje, bajo la dirección de Roberto Blanco, así como en algunas grabaciones que le solicitaron para la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (EGREM).

Su llegada a la Radio es algo curioso; Laura trabajaba en el Museo Nacional de Bellas Artes como Licenciada en Filología, y un día a la hora de la merienda se encontró con Calixto Álvarez, amigo de muchos años quien ya trabajaba en CMBF como asesor, quien necesitaba apoyo para poder realizar otras actividades como compositor.

Laura accedió enseguida, pues su pasión musical le motivó su entrada a la radio, y empezó a trabajar en CMBF como asesora. Poco después, en 1976, comienza su labor como radialista y recuerda que una de los primeros programas que hizo fue el dedicado al aniversario 60 del Maestro Harold Gramatges, a quien le unió una gran amistad.

Así, conocedora de tan eminente músico, empezó a escribir acerca de él, preparó la producción musical y logró una serie dedicada a Gramatges que duró una semana entera. Confiesa que entonces no tenía experiencia en este quehacer, por tanto se hizo radialista de modo empírico; ella apeló a la lógica y a partir de sus amplios conocimientos musicales pudo perfeccionar su quehacer.

De su vida en la Radio, Laura recuerda el espacio "Intérpretes Cubanos" que en un tiempo no se elaboraba como en estos momentos. En aquel entonces acudía a un locutor que leía en vivo el texto escrito por ella.

Un día llegó el momento feliz en que Laura Inclán Narbona comenzó a conducir los espacios radiofónicos escritos por ella. Fue así como la radioaudiencia cubana – hoy también internacional gracias a Internet – puede gracias a ella disfrutar y conocer la vida y obra de grandes figuras del pentagrama cubano y universal.

Curiosamente no es locutora; sí evaluada como hablante, pero dotada de una gracia y encanto que solo es posible cuando proviene de alguien que goza de un talentoso caudal como ella. Agradecida y humilde como es, no olvida la gratitud que debe a muchos de sus maestros y profesores, en particular al Maestro Ángel Vázquez Millares quien tanto apoyo le ha brindado.

Por todas estas razones – y seguidor de sus espacios - desde hace tiempo me propuse conversar con ella. Todo lo que emite su voz es inmanente a su saber; de ahí la elegante pedagogía con que lo hace.

Laura Inclán Narbona vive lo que dice, pues cuanto expresa y enseña en sus comentarios de música, reflexiona sobre parte de su vida. Laura en la Radio, más que dar, se entrega plenamente a sí misma. He ahí su mayor mérito

0 comentarios