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Febrero de amor, historia y victorias

Febrero de amor, historia y victorias

Estamos a punto de concluir otro febrero, mes que tradicionalmente dedicamos a festejar el Día del Amor y la Amistad, sentimiento y actitud que día tras día se evidencia en la cotidianidad de palabras y actitudes de los que escasas veces caemos en cuenta.
Por ello, qué bueno tener un día del año para, además de los regalos y felicitaciones – no imprescindibles, sí válidos cuando traducen sinceridad - reconocer la necesidad de sentir el amor, darlo y recibirlo.
Para las cubanas y cubanos, febrero es mucho más por añadidura, lo que aumenta las motivaciones para el optimismo y la alegría; es un mes con celebraciones que pertenecen a la historia y felizmente señalan momentos de victoria.
Hace 119 años, en 1895, en los campos, bateyes y pueblos de Cuba volvieron a sentirse los aceros del machete emancipador. Poco después la tea incendiaria se enseñoreó como arma estratégica de la Guerra Necesaria preparada desde años antes por José Martí y otros patriotas, muchos de ellos veteranos de las jornadas de 1868, y que durante diez años proclamaron ante el mundo que Cuba desde entonces ya existía como nación beligerante contra el dominio colonial.
Preparar la Guerra del 95 había sido difícil desde el exilio donde el Héroe Nacional de Cuba padeció la vigilancia de la inteligencia española apoyada por la de Estados Unidos. Fueron años de jornadas rayanas en la fatiga y la agonía por el amor patrio, persuadiendo a muchos;  limando asperezas y desacuerdos entre los hacedores de la anterior guerra, todos ellos soldados necesarios en la nueva contienda.
La preparación de la Guerra Necesaria fue tiempo de reveses como el abortado Plan de la Fernandina en diciembre de 1894, cuando el espionaje español detectó por una delación las naves Amadis, Lagonda y Baracoa, listas para zarpar hacia la Patria con pertrechos para iniciar las hostilidades por la emancipación.
Más allá de los sacrificios, el esfuerzo de los patriotas liderados por Martí en torno al Partido Revolucionario Cubano rindió frutos. Cierto que aquella etapa, aunque derrotó al ya decadente imperio español, no se consumó en nuestra definitiva independencia, pero sí constituyó inspiración para no cejar en el noble empeño que se vio culminado en enero de 1959.
Febrero es también el mes en que celebramos el nacimiento del Héroe de Yaguajay, el Comandante Camilo Cienfuegos. Camilo nació el 6 de febrero de de 1932, compañero de lucha de Fidel y Raúl en la expedición del Granma y la Sierra Maestra. Hombre valeroso y de probada sencillez cuya personalidad Fidel resumió al decir que es la imagen del pueblo.
Camilo es el legendario Señor de la Vanguardia protagonista de innumerables proezas durante la invasión de Oriente a Occidente, el hombre que mandarria en mano derribó las puertas de Columbia para convertir el acto en signo trascendente de un cambio total y definitivo en la historia cubana.
En 1958, el 24 de febrero nació también Radio Rebelde, inaugurada por orientación de Fidel aquel glorioso día en la Comandancia de La Plata, en la Sierra Maestra, por el Guerrillero Heroico Ernesto Che Guevara.
Con Radio Rebelde en las montañas y la inconfundible y vibrante voz de Violeta Casal que la identificaba, también comenzó la etapa de la Radio Cubana como instrumento de lucha y de proclamación de la verdad; hecho que al triunfo dio a la luz la Radio Cubana Revolucionaria que hoy tenemos y hacemos, donde el pueblo es su principal protagonista.
Desde los años de la rebeldía Fidel, Raúl y la dirección del Movimiento 26 de Julio conocieron de la necesidad de los medios de difusión y del periodismo revolucionario como recursos indispensables para la concienciación revolucionaria, la difusión de la cultura y el mejoramiento humano.
Por esas razones y muchas más concluimos la idea de que febrero es un mes de amor, historia y victoria. El amor que en su más amplia dimensión se hace notorio en la entrega a una causa justa y humana.
Para todos los cubanos que amamos la tierra que nos vio nacer, febrero es primaveral como aquel abril de 1961 que orientó el derrotero de nuestra historia  con la luz larga de la soberanía y de la libertad.
Este es nuestro febrero de amor, historia y victorias.

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